Existen muchas caminos para mejorar las ventas y todo se reduce a las personas. Una correcta adminitración de la fuerza laboral puede acelerar el crecimiento de ingresos en la empresa.

Muchas veces nos enfocamos en comprender las necesidades de los clientes y no las de los empleados. En un restaurante de Estados Unidos, realizaron un programa enfocado en entender qué tan funcional era el servicio que se ofrecia a través de KPIs para mejorar sus ventas.

El primer paso fue aclarar qué es lo que querían los clientes y como eso se traducía en ganacias y roles para los empleados. Se tuvo que analizar las habilidades de cada uno y que estás condordaran con lo que la posición que tenían. Es decir, comprender las funciones y tareas con base en los datos que ellos mismos aportaro,

Se desarrollaron tres arquetipos de trabajadores; las personas sociales que se distraen mucho pero logran tener relación con los clientes, los emprendedores que siempre están pensando cómo mejorar y ofrecer el mejor servicio, por último los líderes que se distraen muy poco y buscar perfeccionar los procesos para satisfacer a los clientes.

El valor de los empelados se puede cuantificar analizando sus habilidades y herramientas con las que cuentan. Capacitar a los empleados bajo estos términos y medir su crecimiento o estancamiento, ayuda a que las empresas sepan en donde invertir y sean capaces de crecer con el equipo.

Si más lideres de recursos humanos utilizaran el resultado de ingresos para demostrar el valor de las actividades, muchas más personas lograrían ser desarrolladas. Las empresas requieren enfocar sus esfuerzos en entender a sus empleados para identificar las oportunidades potenciales en su proceso de ventas.