A medida que las tecnologías y los modelos comerciales continúan su rápida evolución, las empresas han experimentado un cambio radical en las habilidades de la fuerza laboral que necesitan para prosperar y crecer. Casi nueve de cada diez ejecutivos y gerentes dicen que sus organizaciones ya enfrentan brechas de habilidades o esperan que las brechas se desarrollen en los próximos cinco años.

En una encuesta global realizada a directivos de diversas empresas, se encontró que las empresas carecen del talento que necesitaran en el futuro. Por los cambios en las tendencias del mercado y la tecnología,  los roles dentro de las empresas están en riesgo.

Pocas empresas se encuentran preparadas para responder y un obstáculo que se encuentra es la falta de visibilidad de las habilidades de la fuerza laboral existentes y sus efectos. Las tácticas más usadas para atacar esta situación son la contratación de nuevos empleados y el desarrollo de habilidades de los empleados actuales.

El quién, qué y por qué de los programa de reciclaje

Para abordar las necesidades de talento, más de un tercio de empresas ha vuelto a capacitar al menos a un grupo piloto dentro de su empresa. El propósito comúnmente atacado es permitir la implementación de una nueva oferta, modelo comercial o estrategia.

Las principales habilidades a desarrollar son el pensamiento crítico, toma de decisiones, liderazgo, gestión y análisis de datos. Los empleados piensan que estas son las habilidades enseñadas porque de ser otras, sus empresas no tendrían la capacidad para llevarlo a cabo por falta de experiencia e información.

Con estos cambios, los empleados esperan que los resultados se vean reflejados en los próximos cinco años, donde la mayoría de la fuerza laboral se encuentre en al menos un plan de aprendizaje.

Los esfuerzos de readapatación temprana parecen dar sus frutos

Aunque los esfuerzos de adaptación se encuentren en una etapa inicial, muchas organizaciones ya están obteniendo resultados positivos en ellos. Casi siete de cada diez encuestados informan que los programas han tenido un impacto comercial igual o superior a la inversión realizada.

Las empresas que tienen éxito en estas adaptaciones, tienen más probabilidades de tomar decisiones de manera efectiva en sus actividades. El 84% de los encuestados que informaron haber tenido éxito, dicen que sus empresas tienen esa cultura de cambio, en comparación al 58% de las que pertenecen a organizaciones con programas fallidos.

Mirando hacia el futuro

A medida que se automatizan más tareas y las empresas rediseñan los trabajos para abarcar diferentes actividades, será fundamental implementar estrategias que ayuden a los empleados a desarrollar las nuevas capacidades necesarias. Las empresas que aún no han comenzado a capacitar a sus empleados deben considerar tomar estas medidas:

• Comprender qué habilidades se necesitan

Es posible que las empresas no conozcan todas sus habilidades faltantes pero probablemente tengan algunas en mente. Llevar a cabo un diagnóstico, requiere de un enfoque riguroso y empírico para comparar la oferta de cada habilidad con las necesidades estratégicas de la empresa.

• Ser estratégico en la forma de cerrar las brechas

Llenar la mayoría de lagunas requiere una combinación de enfoques como contratación y capacitación. En esta decisión de incluir la selección de candidatos y el correcto seguimiento de cada dento de la agenda de recapacitación.

• Desarrollar capacidades de formación y asociaciones

Las empresas deben estructurar el viaje de aprendizaje para ayudar a los empleados a retener nuevas habilidades y aplicarlas en el futuro. Se debe aplicar un enfoque presencial y digital, donde se desarrollen grupos con experiencias similares, aplicando diversos recursos de la empresa.